domingo, 11 de marzo de 2012

El análisis de sangre

A la casa del vampiro
me dirijo cual cordero,
y mucho escarnio yo espero
consciente de mi destino.

Cien víctimas hay delante
a las que la sangre toman,
y ya mi impaciencia asoma
pues tiene un límite mi aguante.

Mientras espero mi turno
escribo este manifiesto,
aguardando muy dispuesto
a ese vampiro diurno.

Me llaman, ya me ha tocado.
Entro por un corredor
y allí está el chupador
con aspecto humanizado.

Me sonríe el muy ladino
con una aguja en la mano,
aspecto cordial y sano,
porte elegante y muy fino.
Le muestro el brazo derecho
y me pincha el antebrazo.
Quisiera darle estacazo
en el centro de su pecho,

enseñarle un crucifijo,
una buena ristra de ajos
y ver como su desparpajo
iba a transmutarse… fijo.

Cuando me pincha no miro
porque si la sangre veo
me desmayo del mareo
para chanza del vampiro.

Y aún tiene la osadía
de preguntar si molesta
con su mirada funesta
pinchando con alegría.

Ya después de la extracción
se va pasando el estrés,
aunque he de volver en un mes
a controlarme el Sintrón[i].


[i] Sintrón.- Nombre comercial de un medicamento anticoagulante de la sangre para dolencias cardíacas que hay que controlar periódicamente mediante una analítica de sangre.

José M. Ramos. Pontevedra, 30 enero 2012